26 noviembre 2011

Caricias

II Homenaje a Poe (2º Escrito)

Empezaba a soñar cuando noté una delicada caricia sobre mis pies por encima del edredón. Abrí los ojos en busca de una mano ejecutora, pero al aclararse la oscuridad no encontré más que mi cuarto en su habitual estado. Miré entonces hacia la cama de mi compañero: dormía. -Habrá sido una corriente de aire que se ha colado por alguna rendija-, pensé.

Mi corazón se aceleró cuando por segunda vez una caricia sobre mis pies me despertó. Busqué sin hallar al bromista... Mi compañero seguía en su cama y la ventana estaba cerrada... -No es posible. No existen los fantasmas... tiene que haber sido el edredón que ha caído por su propio peso-, me dije.

Cuando ocurrió por tercera vez, presa del pánico al no ver a nadie, intenté gritar para despertar a mi compañero, pero mi voz no respondía ni tampoco mi cuerpo. Una angustia inconmensurable creció dentro de mí hasta que por fin desperté... y no había nadie.

Safe Creative #1110310415568

El Enemigo de la Luz

II Homenaje a Poe (1.er Escrito):

Por fin llegan las horas tranquilas de la madrugada; las horas para mi paseo silencioso. Son ya más de las cuatro y abro la puerta para salir a las calles casi vacías... las calles oscuras. Como siempre estoy hambriento, excitado, eufórico... pero se me da bien disimularlo. Las luces de las farolas, mis enemigas, gritan mi presencia al ganado desperdigado, pero sólo consiguen excitarme más al mostrarme ante ellos y hacerme consciente de que ninguno sabe mi propósito. Nunca escuchan. Al cruzarme con ellos veo sus rostros ovinos y mi hambre crece: niñatas que vuelven a casa con los zapatos en la mano; gallitos borrachos a los que el alcohol ha confundido y creen que aletear y volar es lo mismo. Me deleito en la selección de mi presa. Las farolas siguen gritando. Ahora a mis espaldas, porque si ellas son mis enemigas yo también sé con quien aliarme. Seguiré a mi presa hasta la oscuridad... hasta su oscuridad total.

Safe Creative #1110300406965

22 noviembre 2011

Lobo sin luna

Sumergido el sol en lo hondo del averno
Donde abrasa las almas de los impuros,
La oscuridad más negra levanta sus muros
Tapiando con celo el azul eterno.

Tras los ladrillos, el gato burlón de Alicia
Desaparece sobre la rama de un árbol
Y oculta consigo la sonrisa de mármol
Que prueba inequívoca su malicia.

En lo alto sólo hay indignas musas.
Helicónides que yerran tras el ocaso,
Que se prodigan. Expulsadas del Parnaso
Por dos ojos a los que salpican profusas.

Dos satélites en trayectoria ascendente,
Brillantes esferas sin órbita concreta,
Surcan el infinito en busca de un planeta
En torno al cual bailar su danza indolente.

He aquí el nacimiento de la voz lobuna,
Melancólico y lóbrego aullido
Que apuñala el corazón y el oído.
Vendrán lunas nuevas, mas sólo hay una luna.

Safe Creative #1102268584175