04 marzo 2012

Para el Amor (Iván...)

Me muero de muerte herido. Me desangro en un charco que duele como la sequía. Esta noche entre pajas de establo la paso como otra cualquiera. Y otra noche pasa y otra noche me seco. Me muero de muerte herido y la muerte bebo. La muerte que viene, la misma muerte que espero y la muerte que deseo. A tu lado. Y cuando no haya muerto moriré por ti. Y cuando muera resucitaré por ti. Y si tú has muerto visitaré tu esqueleto seco de huesos. Y al mirar tu calavera siempre te veré sonriente. Porque tu sonrisa es lo único que me calma este dolor de muerte. Con tus dientes me sonríes esta ancha herida. Me desangro de alegría. Te veo y te miro, te miro y te veo. Cuando muera, entierrenme muy hondo. Cerca del centro de la tierra o en Australia, pero en un agujero profundo. Que no pueda salir. Que me halle siempre aquí tras la muerte que tú me has dado. Celestial entierro. Muerte digna de mí. Tú. Y te beberé, seco, áspero y muerto. Y al beberte gritaré tu nombre que nadie sabe. Y al gritarlo lo escucharé como la sorda que nunca se escuhó hablar. Y al oirme volveré a morirme en tu nombre. Y junto a tu esqueleto, mis gusanos desearán ser los tuyos. Porque yo te amo muerto. Gracias a la vida que me ha dado tanto! Un lunar me ha dado. El tacto que te toca. La piel seca pero viva. Y la muerte dulce embotellada en un frasco. El sabor de un pescado al horno que huele porque tú existes. El pescado que ha muerto para que yo también pueda morir a tu lado. Y si te canto, no me hagas caso. No me escuches cuando grito. Déjame morir de muerte herido. Mátame si es preciso. Porque te quiero más allá del oceano. Porque flotando en tierra firme te desconozco y te adoro. Porque tiemblan mis manos al escribirte. Porque Los Secretos me intoxican. Déjame morir así. Quiero sangrar tras el cristal de una ventana rota por la que escape volando a buscarte en mi sueño. Y goteando iré a decirte que te quiero. Y embriagado te diré que ha sido un accidente. Que me he cortado al afeitarme. Que sólo me muero por ti ante el espejo. Y cuando me mire las uñas veré mis dedos. Y al verlos veré mi esqueleto. Y ya nunca veré nada más. La muerte me cegará. Y te cegará a ti también. Pero la muerte será sorda. Y yo seré el mudo. El teclado de mi ordenador es mi piano. La música que compongo es para ti. Y la muerte que muero es la tuya. Sólo quiero que sepas que seré el gusano que te coma las entrañas en tu casa bajo tierra. Sólo quiero que sepas que las moscas son mi amor. No las mires mal. Las moscas son mi amor. Y si te quiero es porque tú naciste. Y si te quiero es porque tú viniste. Y si te quiero es mi problema. Aún, cuando las campanas suenan recuerdo tu aliento. No te confundas si susurro tu nombre muerto. A veces me equivoco. Sólo dos letras necesito para confundirme y gritar tu nombre. Y los puntos suspensivos se me hacen tan cortos... Y te digo, y te nombro, y te vuelvo a nombrar. Deben ser tus ojos oblicuos. Tú párpado. Yo también sería párpado para proteger esos ojos. Porque tu muerte es mi muerte. Por eso vivo. Para que tú no mueras. Para que si te mueres, poder comerme tu carne que nunca tuve. Para que si te mueres, morirme de amor contigo. Para que si te mueres ser mosca. Mosca enamorada. Zumbar tu nombre en canciones en inglés. Zumbar tu nombre muerto de muerta y morirme en un zumbido. Verte sonreir. No te rías, por favor. No me ametralles con tu risa. Se hace oscuro y mi piano desafina. Sólo quiero morir tranquilo... sin haberte amado, ni muerto ni vivo.

Safe Creative #1203041239913

No hay comentarios: